Al frente de Ultupuquio, en
las inmediaciones del paraje de Mariash en el lado Sur del distrito de San
Marcos, provincia de Huari, departamento de Ancash, se encuentra una formación rocosa muy
peculiar, que normalmente es conocido como el cerro "Achiquepa
Racan", que traducido al castellano significa: "la vagina de una
mujer mala", conocido así de acuerdo a las creencias en el contexto mágico y religioso andino
del departamento de Ancash.
Achique era una bruja, una mujer que cometía muchísimas maldades y siempre perseguía a las almas de inocentes niños y niñas que se iban al cielo, pues ella buscaba a las almas buenas para transformarse y así llegar al cielo, en su intento de entrar al paraíso fue echado del cielo por San Pedro, volviendo a la tierra en la inmensidad del espacio decía: “racta pellonllaman, racta colchallaman, racta pellonllaman, racta colchallaman, racta pellonllaman, racta colchallaman” que traducido al castellano significa, “que pedía caer en una alfombra gruesa o en una colcha gruesa para salvar su vida” pero no se cumplió su pedido, pues su cuerpo cayó hacia la tierra y sus restos se esparcieron por todos los andes, de sus nalgas y de sus senos se originaron las altas montañas: como el Huascaran, Huandoy y el Huantzan, y de su huashan, que traducido al castellano significa, "columna vertebral" las cumbres de la cordillera blanca y negra del Perú, y no sé por qué motivo, su parte tan íntima (la vagina) cayó al frente de Ultupuquio, en las inmediaciones del paraje de Mariash, a un costado del cerro tabla Ghagha.
En las épocas de mi niñez y adolescencia anduve por estos cerros buscando yanta (leña seca) y verdi ghesghi (achupalla verde que servía de alimento a los cuyes). Este cuento lo escuché en las épocas de mi niñez en la versión oral de mis familiares, entre ellas de mi abuela doña Donatilda Gaytán Medalla.
Achique era una bruja, una mujer que cometía muchísimas maldades y siempre perseguía a las almas de inocentes niños y niñas que se iban al cielo, pues ella buscaba a las almas buenas para transformarse y así llegar al cielo, en su intento de entrar al paraíso fue echado del cielo por San Pedro, volviendo a la tierra en la inmensidad del espacio decía: “racta pellonllaman, racta colchallaman, racta pellonllaman, racta colchallaman, racta pellonllaman, racta colchallaman” que traducido al castellano significa, “que pedía caer en una alfombra gruesa o en una colcha gruesa para salvar su vida” pero no se cumplió su pedido, pues su cuerpo cayó hacia la tierra y sus restos se esparcieron por todos los andes, de sus nalgas y de sus senos se originaron las altas montañas: como el Huascaran, Huandoy y el Huantzan, y de su huashan, que traducido al castellano significa, "columna vertebral" las cumbres de la cordillera blanca y negra del Perú, y no sé por qué motivo, su parte tan íntima (la vagina) cayó al frente de Ultupuquio, en las inmediaciones del paraje de Mariash, a un costado del cerro tabla Ghagha.
En las épocas de mi niñez y adolescencia anduve por estos cerros buscando yanta (leña seca) y verdi ghesghi (achupalla verde que servía de alimento a los cuyes). Este cuento lo escuché en las épocas de mi niñez en la versión oral de mis familiares, entre ellas de mi abuela doña Donatilda Gaytán Medalla.
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